Rusia desmintió este martes haber bombardeado la víspera un centro comercial lleno de gente en la ciudad ucraniana de Kremenchuk y aseguró que el lugar, en desuso, se incendió tras haber atacado un depósito de armas cercano. Las autoridades de Ucrania informaron de al menos 18 muertos en el ataque de este centro, repleto de gente en ese momento.
"Las detonaciones de las municiones destinadas a las armas occidentales provocaron el incendio (...) en un centro comercial que no estaba abierto", afirmó el ejército ruso.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, consideró que "las explicaciones exhaustivas del ministerio de Defensa desmienten totalmente la versión" ucraniana de los hechos.
Desde el inicio de la ofensiva contra Ucrania, el 24 de febrero, Rusia rechaza sistemáticamente todas las acusaciones de bombardeos o ataques contra civiles. Alega que se trata de montajes o atribuye los hechos a Ucrania.