Economía ECO News -  9 de octubre de 2025 - 20:26

El impacto de la salud y una población sana en la economía de Panamá

Algo que debe quedar muy claro es que invertir en salud es invertir en el futuro económico de Panamá.

CONEXIÓN FINANCIERA 9 OCTUBRE

Disminución en la carga al sector salud

Vayamos a lo más obvio: Una población saludable reduce significativamente los costos asociados a la atención médica. Cuando los niveles de salud son adecuados, menos personas requieren tratamiento por enfermedades crónicas o infecciosas, lo que disminuye la carga financiera sobre el sistema de salud. Esto permite que los recursos disponibles se destinen a la prevención y promoción de la salud, generando un ciclo positivo donde menos enfermedades se traducen en menos gastos públicos y privados. En Panamá, mantener esta tendencia ayuda a liberar fondos para inversión en infraestructura, educación y otros sectores económicos, fomentando así un crecimiento más equilibrado.

Además, la salud de la población influye directamente en la productividad laboral. Trabajadores sanos son más eficientes y tienen menor ausentismo laboral, lo cual aumenta la productividad general y favorece el crecimiento económico. En Panamá, donde la economía está orientada a sectores como el comercio, la logística, el turismo y la banca, contar con una fuerza laboral saludable es fundamental para mantener la competitividad internacional. La reducción en las tasas de enfermedades como la diabetes, hipertensión y enfermedades respiratorias, que son prevalentes en la región, tiene un impacto positivo en la fuerza laboral y en la economía en general.

PROMOCIÓN SALUD (1)
Panamá debe apostar por la promoción y preservación de la salud de la población.

Panamá debe apostar por la promoción y preservación de la salud de la población.

Salud pública atrae inversión

Por otro lado, una población sana atrae más inversión extranjera y fomenta el turismo. Panamá, reconocida por el Canal de Panamá y su economía de servicios, se beneficia enormemente de un entorno donde la salud pública está garantizada. Los turistas y los inversionistas consideran la calidad de vida, incluyendo la salud pública, como un factor determinante para escoger destinos o regiones para invertir.

No menos importante es el impacto social de la salud en la estabilidad y cohesión social del país. Cuando los ciudadanos se sienten saludables y bien cuidados, la confianza en las instituciones aumenta y se fomenta una cultura de bienestar. Esto motiva a las personas a participar activamente en la economía y en proyectos sociales, promoviendo un desarrollo más inclusivo y sostenible.

Algo que debe quedar muy claro es que invertir en salud es invertir en el futuro económico del país. Programas de prevención, educación en estilos de vida saludables y acceso universal a servicios médicos son fundamentales. Financiar la salud no solo mejora la calidad de vida, sino que también genera beneficios económicos a largo plazo, disminuyendo la pobreza y promoviendo un crecimiento económico más equitativo.

Debemos todos tener la meta país de mantener a una población sana y que estas acciones tienen un impacto multifacético que favorece la economía en múltiples frentes: disminución de costos, aumento de productividad, atracción de inversión y fortalecimiento del bienestar social. Por ello, apostar por políticas de salud integrales no solo es un compromiso humano, sino también una estrategia económica inteligente para el desarrollo sostenible del país.

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