La Defensoría del Pueblo anunció que desplegará un grupo de 350 observadores electorales para monitorear las elecciones generales del próximo 5 de mayo.
Eduardo Leblanc, defensor del Pueblo, explicó que, al concluir las 24 horas del proceso electoral, la Institución Nacional de Derechos Humanos entregará un informe al Tribunal Electoral (TE) con las principales incidencias observadas durante la jornada.
Leblanc agregó que, si es necesario ofrecer una opinión antes de la presentación del informe final, lo harán durante el recorrido, pero esperan que las elecciones se desarrollen de manera transparente y sin violencia.
Alessandra Chena, directora de los Derechos Humanos de la Mujer, destacó los riesgos de violencia política hacia las mujeres en el contexto electoral, enumerando varias formas de agresión, como acoso y amenazas en línea, difamación y ataques personales, comentarios sexistas y despectivos, así como desequilibrio en la cobertura mediática y discriminación en el financiamiento.
Chena subrayó que la intimidación física representa una de las amenazas más serias durante las elecciones.
En cuanto al voto accesible, Margareth Madrigal, oficial de Derechos Humanos de la Dirección de Unidades Especializadas, indicó que se dará prioridad a las personas mayores de 70 años y a aquellas con movilidad reducida o alguna discapacidad para facilitarles el ejercicio del voto.
Además de los observadores de la Defensoría del Pueblo, el Tribunal Electoral también desplegará sus propios observadores para monitorear la transparencia del proceso.