Agustín Lara, reconocido por ser exaspirante a diputado y subdirector del Registro Público, fue acribillado por sicarios en el sector de los Andes, San Miguelito, luego de una jornada de inscripción del Partido Revolucionario Democrático. Uno de los primeros en pronunciarse por el hecho de sangre y referirse a la narcopolítica fue el secretario del PRD, Pedro Miguel González. Pidió un alto a la tolerancia del crimen organizado en los partidos políticos. Mientras tanto, en la oposición las reacciones no se hicieron esperar.
Por su parte, José Blandón, presidente del Partido Panameñista dijo: "Es hora ya que se sustituya al ministro de Seguridad, ya sea que él renuncie o que sea destituido y que se presente con claridad un plan para atacar este problema de delincuencia por parte del Gobierno Nacional".
El presidente de la Asamblea Nacional, Crispiano Adames, lamentó y condenó el homicidio del militante del PRD.
"El sicariato no esta exclusivamente contemplado como un servicio del narcotráfico", manifestó Adames.
Uno de los que no está conforme con la seguridad en el país es el general retirado, Rubén Darío Paredes. El militar no cree que en Panamá reine la paz, tal como lo asegura el ministro de seguridad, Juan Pino.
La exfiscal de drogas, Ivonne Peña, está convencida que la narcopolítica ha salpicado muchos gobiernos, pero que en este, los índices son impresionantes.
Pero, la gran pregunta es ¿está el gobierno aplicando una política integral de seguridad?
En este año varios militantes del PRD han sido víctimas del crimen organizado. Uno de los casos más estremecedores fue el asesinato del exdiputado Diógenes Vergara, en febrero de este año.