La situación en Venezuela vuelve a escalar tras las declaraciones del expresidente estadounidense Donald Trump, quien adelantó la posibilidad de un ataque contra las capacidades militares del régimen de Nicolás Maduro. El experto en relaciones internacionales, Euclides Tapia, analizó los posibles escenarios operativos, diplomáticos y regionales que podría desencadenar una acción liderada por Estados Unidos.
Apuntó que Venezuela ya pudo haber tomado medidas similares frente a esta advertencia.
El analista añadió que informar anticipadamente sobre un ataque “complica la operación”, pues ofrece tiempo para reubicar capacidades militares y preparar refugios estratégicos. Por ello, considera que la declaración podría haber tenido como objetivo presionar políticamente a Maduro para que evalúe una salida negociada.
Escenarios de salida para Maduro y riesgos de confrontación
Aseguró que, desde una perspectiva histórica, lo más aconsejable para Maduro sería retirarse para evitar un desenlace violento similar al de Noriega o Saddam Hussein.
Aunque se especula con destinos posibles como Turquía u otros países con vínculos políticos, el experto considera que la permanencia en Venezuela podría conducirlo a un escenario “inédito y dramático”, ya que el régimen no tiene capacidad militar real para enfrentar a Estados Unidos, pero sí para generar conflictos posteriores a un eventual cambio de gobierno.
Ataque aéreo a objetivos terrestres, no incursión militar
En torno al tipo de operación militar que podría ejecutarse, Tapia descartó una incursión terrestre, asegurando que no se ha desplegado una fuerza suficiente para enfrentar al ejército venezolano.
También cuestionó la existencia de un “plan B” estadounidense, más allá de la instalación del gobierno que Washington considera legítimo. Según Tapia, Estados Unidos mantiene como línea principal el reconocimiento de María Corina Machado como ganadora de las elecciones y no contempla nuevas votaciones en un eventual escenario de transición.
Impacto regional y reacomodo de aliados
También, señaló que un ataque estadounidense modificaría el equilibrio político en América Latina y afectaría directamente a los países alineados con el régimen venezolano, como Cuba, Nicaragua o sectores del Caribe.
Sobre potencias externas como Irán, Rusia y China, indicó que aunque mantienen inversiones y alianzas con Caracas, su participación directa sería improbable. Rusia está concentrada en Ucrania y China no suele involucrarse en conflictos bélicos de esta naturaleza.
El experto anticipa que, pese a condenas diplomáticas, la región tendría un margen reducido para contrarrestar la acción estadounidense.


