Luego que Panamá le cerró la puerta al matrimonio igualitario con un fallo de la Corte Suprema de Justicia, la comunidad LGBTI espera que la Corte Interamericana de Derechos Humanos revoque la decisión en el marco del derecho internacional. En un fallo sin precedentes, en medio de una sociedad con opiniones divididas, el Pleno de la Corte Suprema de Justicia de Panamá declaró que no es inconstitucional un artículo del Código de Familia que prohíbe el matrimonio entre personas del mismo sexo. Los magistrados determinaron que la frase "entre un hombre y una mujer”, contenida en el artículo 26 del Código de la Familia, no viola la carta magna.
Ramírez, quien presentó la demanda de inconstitucionalidad, cuestionó la decisión del máximo Tribunal por ir en vía contraria de los derechos humanos e ignorar el bloque de la constitucionalidad. Espera que esto se dirima en los tribunales internacionales en los próximos cinco años.
La otra cara de la moneda, los movimiento Profamilia, celebran la decisión de la Corte Suprema de Justicia, adoptada con voto mayoritario y bajo la ponencia de la magistrada presidenta María Eugenia López.
Matrimonio igualitario: Conoce los países que le dijeron Sí
Juan Francisco De La Guardia Brin, Presidente Vitalicio Alianza Panameña por la Vida y la Familia expresó lo siguiente: "Ha sido un fallo en derecho, ha sido un fallo que magistralmente ha planteado la magistrada María Eugenia López Arias sobre cuál es la razón por la cual Panamá es el único matrimonio que se acepta entre un hombre y una mujer", resaltó.
La Alianza Panameña por la Vida y la Familia es de la tesis que con la decisión no existe discriminación hacia la comunidad LGBTI.
De La Guardia explica que defienden la familia, excepto la familia de matrimonio.
En el fallo señala que la unión de personas del mismo sexo no tiene categoría de derecho humano y tampoco de derecho fundamental, porque carece de un reconocimiento convencional y constitucional. Además, que el matrimonio debe concentrarse entre un hombre y una mujer, legalmente capaces de unirse, debido a que prohibición del matrimonio del mismo sexo se justifica en la familia y la continuidad de la especie humana.