De acuerdo con el Statista Market Insights, se prevé que los ingresos del mercado de los viajes y el turismo aumenten cerca de un 60% en América Latina y el Caribe en 2023, volviendo a niveles anteriores a la pandemia. En Brasil, se espera que los ingresos procedentes de reservas de cruceros, hoteles, alquileres vacacionales y paquetes turísticos alcancen aproximadamente 16.360 millones de dólares estadounidenses, frente a los 13.150 millones del año anterior.
Posiblemente ninguna otra industria haya resultado más afectada por la pandemia de COVID-19 que la del turismo. Sin embargo, según la Organización Mundial del Turismo (OMT), se registran signos positivos de recuperación en todas las regiones del mundo. En América Latina, este organismo anunció recientemente un acuerdo de cooperación con el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) destinado a reforzar el sector turístico de la región y fomentar su sostenibilidad y resiliencia.
En Panamá, la Cámara de Comercio, como parte de la Agenda País 2019-2014 ve el turismo como un sector con de grandes retos y oportunidades para un crecimiento económico competitivo. Entre los compromisos que hace seguimiento el gremio está el accionar los recursos y la debida coordinación entre las diferentes instituciones que participan en la actividad para la reanudación y sostenimiento de la publicidad para la promoción de Panamá como un destino a nivel internacional, y asegurar los recursos para el Fondo de Promoción Turística, con un mínimo de 20 millones de dólares. El reto mediano plazo es aprovechar al máximo el Aeropuerto Internacional de Tocumen para vender Panamá como destino a los más de 15 millones de pasajeros que lo utilizan cada año, a través de un centro de experiencia a gran escala que permita al viajero conocer el país, su cultura, naturaleza y biodiversidad, gastronomía y folclore, como una atracción internacional tipo parque temático.