El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó un decreto que clasifica el fentanilo, un potente opioide responsable de miles de muertes anuales, como un arma de destrucción masiva. La medida busca reforzar la política antidrogas del país y legitimar acciones militares contra el narcotráfico.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), unas 48.000 personas murieron por fentanilo en 2024, dentro de un total de 80.000 muertes por sobredosis en el país.
Contexto: ataques militares contra el narcotráfico
El decreto se emitió después de una ceremonia de entrega de medallas a militares que participan en la vigilancia de la frontera con México. Trump, impulsor de políticas antidrogas radicales, ya había clasificado previamente a los cárteles de droga como “organizaciones terroristas”, lo que, según juristas del Departamento de Justicia y el Pentágono, autoriza ataques militares en el Caribe contra presuntas narcolanchas.
Desde septiembre, esta campaña ha incluido ataques con misiles que han causado al menos 90 muertos, según informes oficiales. El gobierno asegura que todos los tripulantes eran narcotraficantes, aunque esta información no ha podido ser verificada de manera independiente.
Producción del fentanilo y origen de los precursores químicos
Expertos en narcotráfico y la DEA han señalado que gran parte del fentanilo se produce en México, utilizando precursores químicos provenientes de China. La reciente clasificación del opioide como arma de destrucción masiva podría ampliar el arsenal legal que el gobierno Trump utiliza para justificar sus operaciones.
Reacciones políticas y legales
La oposición demócrata, junto con algunos republicanos, ha pedido mayor rendición de cuentas en el Congreso sobre el impacto de los ataques, que han generado preocupación en varios países de la región. Expertos legales advierten que estas acciones podrían constituir crímenes de guerra, al no existir confirmación independiente sobre los objetivos de los ataques.
Próximos pasos: ataques “en tierra” contra cárteles
Trump anunció que “muy pronto” comenzarán ataques en tierra contra los cárteles de droga, los cuales podrán llevarse a cabo en cualquier país al sur de la frontera estadounidense, con Venezuela como uno de los objetivos principales.







