El declive de la sindicalización y las medidas de los empleadores para impedir que los trabajadores cambien de empleo han socavado la competencia en el mercado laboral de Estados Unidos, haciendo que bajen los salarios de los estadounidenses en un 20%, informó el lunes el Departamento del Tesoro.
El presidente estadounidense Joe Biden ha culpado en repetidas ocasiones a la consolidación empresarial de hacer subir los precios, y el año pasado firmó una orden ejecutiva destinada a aumentar la competencia en la mayor economía del mundo.
El Tesoro realizó un estudio, producto de la orden de Joe Biden, para analizar el impacto del aumento de la consolidación en los trabajadores.
El informe concluyó que "el mercado laboral estadounidense dista mucho de la competencia perfecta que economistas habían supuesto durante mucho tiempo, debido a la concentración de empleadores y a prácticas laborales anticompetitivas".
Es un "problema importante", y el informe estimó que la "falta de competencia provoca un descenso salarial de casi 20% para los trabajadores, en relación con lo que ganarían de otra forma".
Esas medidas "han obligado a los trabajadores a aceptar salarios más bajos y peores condiciones de trabajo".
El Tesoro indicó que aumentar las medidas de aplicación de normas antimonopolio, facilitar la sindicalización de los empleados y aumentar el salario mínimo podría mejorar la competencia.
Si bien los salarios han aumentado a medida que la economía estadounidense se recuperaba de la pandemia, la inflación también se ha disparado a niveles no vistos en cuatro décadas, y la administración Joe Biden ha tratado de culpar cada vez más a las empresas por el aumento de los precios.
Joe Biden ha respaldado el aumento del salario mínimo nacional a 15 dólares la hora, pero la propuesta no ha llegado a ninguna parte en el Congreso, donde sus legisladores demócratas tienen una escasa mayoría en ambas cámaras.