Elon Musk dijo el viernes por la noche que restablecerá las cuentas de Twitter de varios periodistas suspendidos de la red social después de que el empresario los acusara de poner en peligro a su familia. "La gente ha hablado. Las cuentas que revelaron mi ubicación verán ahora la suspensión levantada", dijo el magnate después del revuelo causado por su decisión. Musk había organizado una encuesta en Twitter preguntando a los usuarios si debía rehabilitar las cuentas ahora o en una semana. Casi el 59% de los 3,69 millones de participantes votaron por hacerlo inmediatamente.
Algunas de las cuentas suspendidas, como la del exreportero de Vox Aaron Rupar, volvieron a publicar contenido.
Esta última de una serie de controversias comenzó cuando Musk suspendió la cuenta @elonjet que informaba automáticamente de los viajes del avión privado del empresario, también dueño de SpaceX y Tesla. Musk justificó la decisión porque el vehículo que llevaba a uno de sus hijos por Los Angeles fue perseguido por un "acosador loco", un incidente que pareció atribuir a la monitorización de su avión privado.
Algunos periodistas informaron del caso, también mediante tuits que enlazaban a la cuenta @elonjet. Musk los acusó de publicar "las coordenadas que permitirían un asesinato".
En un foro en vivo organizado el viernes en Twitter, Musk no aportó evidencias sobre sus denuncias y afirmó a algunos de los periodistas afectados -- que si pudieron participar en los espacios de discusión de la plataforma -- que no iban a tener un tratamiento especial por ser reporteros.
"Todo el mundo va a ser tratado de la misma manera (...) Ustedes no son especiales porque son periodistas", afirmó el empresario. Pero al ser interrogado para dar más precisiones sobre sus acusaciones, Musk decidió terminar la discusión y salió del foro.
UE advierte a Musk de sanciones por suspensión de cuentas
Controversias
La decisión de Musk generó duras advertencias de la UE.
Stephane Dujarric, portavoz del secretario general del organismo, Antonio Guterres, calificó la decisión como un "precedente peligroso".
Twitter ha estado rodeado de controversias desde que Musk tomó el control de la plataforma tras pagar 44.000 millones de dólares por la red social, tras vender acciones de Tesla, su exitosa empresa de coches eléctricos.