Disidentes de la extinta guerrilla FARC detonaron explosivos junto a un recinto militar en la ciudad de Cali, Colombia (suroeste), afectando varias viviendas de militares y civiles, informó el ejército el viernes.
Situación FARC - Colombia
Rodríguez atribuyó el ataque al Estado Mayor Central (EMC), la facción más grande de los rebeldes que rechazaron el acuerdo de paz de 2016 que desmovilizó a las FARC.
El camión llevaba cinco cilindros explosivos. Los guerrilleros "aproximaron el vehículo (...) de la instalación militar y activaron una carga que lanzó los cilindros" hacia el interior.
El EMC agrupa a unos 3.500 combatientes y mantiene tensas negociaciones de paz con el gobierno desde finales del año pasado. A finales de marzo, el asesinato de una líder indígena llevó al Ejecutivo a suspender en tres regiones del suroeste del país la tregua que había pactado con los insurgentes.
Tras la ruptura, los militares avanzaron sobre las posiciones del EMC y dieron de baja a una docena de sus combatientes.
En un comunicado emitido el viernes por las partes de la mesa de diálogos entre el gobierno y la disidencia, los delegados aseguraron que "se acordó continuar con los diálogos" pese a los recientes incidentes.
Entre jueves y viernes, los guerrilleros también lanzaron granadas contra instalaciones de la policía en Tumaco y Jamundí (suroeste).
El comandante del ejército, general Luis Ospina, aseguró que desde el inicio de la tregua el EMC ha realizado más de 600 "actividades" consideradas violatorias a lo pactado.
La disidencia, al mando de "Iván Mordisco", controla rutas de narcotráfico en las fronteras con Ecuador y Venezuela, según inteligencia militar. El gobierno reconoce que los rebeldes han aprovechado la tregua para aumentar su número de miembros.
El presidente Gustavo Petro apuesta por desactivar el conflicto armado de seis décadas dialogando con varias facciones disidentes de las FARC y las organizaciones armadas del narcotráfico. Pero la oposición de derecha acusa un deterioro del orden público.