Mariana León, investigadora del Centro de Investigación Educativa de Panamá (CIEDU), compartió la realidad de los docentes panameños, quienes, a pesar de contar con altos niveles educativos, enfrentan múltiples desafíos tanto en su trabajo como en su vida personal.
En cuanto a su formación, la mayoría de los docentes posee una licenciatura en educación, particularmente en educación primaria, ya que la mayoría enseña desde el primer hasta el sexto grado.
Un dato relevante es que alrededor del 15% de los docentes ya han obtenido una maestría, lo que refleja su continuo interés por la educación y su formación académica. A pesar de este alto nivel educativo.
Si los docentes están tan bien preparados, ¿por qué seguimos enfrentando dificultades en el aprendizaje de los estudiantes?
Según la investigadora, es crucial profundizar en la calidad de la formación que reciben los docentes y en cómo aprenden quienes enseñan.
Además, uno de los aspectos que León destacó es el envejecimiento de la población docente en Panamá. Muchos docentes optan por no jubilarse, incluso cuando ya podrían hacerlo, debido a razones económicas.
"Es necesario explorar formas de motivar a estos docentes, especialmente aquellos que superan los 70 años, a tener una salida digna de la profesión", señaló León. La recomendación es ofrecer una jubilación adecuada, que permita a los docentes retirarse con una compensación justa y seguir atendiendo a sus responsabilidades familiares.