En respuesta a los altos niveles de mortalidad materna y neonatal en las Comarcas Indígenas y las áreas rurales dispersas de Panamá, el Ministerio de Salud (MINSA) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) implementa el Programa de Apoyos Comunitarios a la Salud Materno-Infantil ( PACO), como estrategia innovadora de integración de la comunidad con el sistema de salud local para salvar las vidas de mujeres y niños.
Indicó que las mujeres embarazadas reciben un apoyo económico de parte del programa para que asistan a las citas de control, así como también reciben charlas de orientación para la prevención de embarazos continuos y a las que desean se les suministra anticonceptivos.
Por su parte, el Dr. Aníbal Ortiz, jefe de Provisión de Servicios del MINSA en Bocas del Toro, aboga por que el programa se mantenga en la región por los grandes beneficios que ha producido en la reducción de muertes de mujeres y sus bebés durante el embarazo.
Ortiz dijo que en el programa se atienden en mayor parte mujeres de Chiriquí Grande y de la comarca Ngabe-Buglé.
El Programa de Apoyos Comunitarios (PACO) forma parte de una de las intervenciones comunitarias en un paquete denominada “Contigo, Red de salud indígena y rural; En éste se pone en marcha una estrategia de organización y funcionamiento de la red comunitaria que permita la entrega de apoyos económicos a mujeres embarazadas, comités de traslados y promotores voluntarios. Además, de un estipendio a las consejeras comunitarias y promotores, con el objetivo de aumentar la asistencia de mujeres embarazadas, puérperas y niños a los servicios de salud materno-infantil y nutrición.
A través de PACO se ofrece información, acompañamiento y apoyos económicos; servicios materno-infantiles a demandar: captación temprana, controles prenatales, parto institucional y atención puerperal y neonatal, emergencias obstétricas y neonatales.