El Ministerio de Salud (Minsa) a través de la Dirección de Farmacia y Drogas, dio a conocer sobre la alerta emitida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) referente a productos identificados en Indonesia y comunicados por la Autoridad Reguladora Nacional (Badan POM) los días 20 y 30 de octubre de 2022, que contiene cantidades inaceptables de etilenglicol y/o dietilenglicol como contaminantes.
Los productos identificados en el comunicado de la OMS son los siguientes: jarabe Termorex, el jarabe Flurin DMP, el jarabe para la tos Unibebi, las gotas de paracetamol Unibebi Demam, el jarabe de paracetamol Unibebi Demam, las gotas de paracetamol, el jarabe de paracetamol (menta) y el jarabe Vipcol.
Hasta la fecha, estos productos han sido identificados en Indonesia. Sin embargo, pueden haber sido distribuidos, a través de mercados informales a otros países o regiones.
Los productos de calidad inferior a los que se hace referencia en esta alerta no son seguros y su uso, especialmente en niños, puede provocar lesiones graves o la muerte. Los efectos tóxicos pueden incluir dolor abdominal, vómitos, diarrea, incapacidad para orinar, dolor de cabeza, alteración del estado mental y lesión renal aguda que puede provocar la muerte.
Se insta a los fabricantes de formas de dosificación líquidas, especialmente jarabes que contienen excipientes, incluidos propilenglicol, polietilenglicol, sorbitol y/o glicerina/glicerol, a realizar pruebas para detectar la presencia de contaminantes como etilenglicol y dietilenglicol antes de su uso en medicamentos.
El etilenglicol y el dietilenglicol son tóxicos para los humanos cuando se consumen y pueden resultar fatales.
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Cabe destacar que, han pasado 16 años desde el envenenamiento con dietilenglicol y aún hay cientos de panameños que esperan ser reconocidos como afectados de los 220 mil frascos de jarabe que contenían dietilenglicol distribuidos entre el 2004 y 2006.
En octubre de 2006 salió a la luz pública el caso del envenenamiento masivo, que se dio entre 2004 y ese año con la distribución de un jarabe para la tos que resultó tóxico porque la CSS lo formuló con dietilenglicol, un refrigerante industrial.
Actualmente, de los cerca de 3 mil afectados, únicamente unos mil 80 personas tienen pensión vitalicia, según cálculos del Comité de Familiares de Víctimas por el Derecho a la Salud y la Vida (Cofadesavi).
Los pacientes están solicitando desde hace año que el proceso de certificación se agilice y también se aumente el monto de la pensión a mil 500 dólares.