Miembros del nuevo gabinete del primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, viajaron el jueves a Florida para mantener conversaciones con miembros del equipo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para evitar una guerra comercial.
El gobierno canadiense no especifica quiénes serán sus interlocutores estadounidenses.
Trump ha amenazado con imponer aranceles del 25% a todas las importaciones canadienses cuando asuma la presidencia, el 20 de enero, mientras Ottawa no aborde la entrada de inmigrantes irregulares y de fentanilo a Estados Unidos.
Trudeau aseguró que tomará represalias si el republicano materializa su amenaza, aunque sin explicar medidas concretas.
Las reuniones, previstas para el viernes, "se centrarán en los esfuerzos de Canadá para combatir el tráfico de fentanilo y la inmigración ilegal", según el comunicado.
Los ministros canadienses informarán al equipo de Trump sobre un nuevo plan de seguridad fronteriza, al que destinarán 1.000 millones de dólares canadienses (694 millones de dólares), para atender las peticiones del magnate.
Los enviados de Trudeau también advertirán de "los impactos negativos que la imposición de aranceles del 25% a los productos canadienses tendría tanto en Canadá como en Estados Unidos".