El nuevo presidente de Colombia, Gustavo Petro, propuso este jueves ampliar la legalización del cannabis, cuyo cultivo y comercialización ya está permitido en el país con fines medicinales.
Colombia, el principal productor de cocaína del mundo, legalizó el cannabis medicinal en 2016. Desde entonces varias compañías extranjeras han recibido licencias para producir y exportar marihuana, pero el comercio con fines recreativos sigue penalizado.
En los últimos años, varios países como Sudáfrica, Uruguay y Canadá han legalizado la marihuana, al igual que algunos estados de Estados Unidos.
Disidentes del pacto de paz que desarmó a la guerrilla de las FARC en 2017, rebeldes del ELN y otros grupos armados se disputan a sangre y fuego las rentas del narcotráfico y otros negocios ilegales en varias regiones de Colombia, que registra casi 60 masacres en lo que va del año.
"Reunamos la gente (para discutir la legalización). Incluso que lleguen desarmados los que están armados", expresó el mandatario.
Petro ha llamado a terminar la "fracasada" guerra contra las drogas, en la que Estados Unidos es el principal socio de Colombia.
Washington dice estar abierto a una "conversación abierta y honesta" sobre el tema.