El secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, afirmó el miércoles que su país está "decidido" a obtener ya una tregua entre Israel y Hamás, llamando al movimiento palestino a aceptar la última propuesta y reiterando al gobierno israelí su oposición a una invasión de Rafah.
Después, Blinken se reunió con el primer ministro Benjamin Netanyahu y reiteró su rechazo a una operación terrestre contra Rafah, en el sur de Gaza, donde subsisten hacinados 1,5 millones de palestinos, en su mayoría desplazados del conflicto.
Blinken "reiteró la clara posición de Estados Unidos sobre Rafah", informó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Horas antes de que Blinken aterrizara en Israel, Netanyahu reafirmó su promesa de invadir Rafah.
Una delegación de Hamás estuvo el lunes en la capital egipcia y regresó a Catar para estudiar la nueva propuesta de tregua, según una fuente cercana al movimiento.
Hamás responderá a la propuesta "en un plazo muy breve", afirmó este miércoles a AFP Suhail al Hindi, un alto dirigente del movimiento palestino que enfatizó que el cese el fuego debe ser permanente.
Según un alto funcionario israelí, el gobierno esperará hasta la noche del miércoles a Hamás, antes de decidir si envía a una delegación a Egipto con vistas a un posible acuerdo.
- "Hamás tiene que decir que sí" -
Egipto, Catar y Estados Unidos, los países mediadores, trabajan para un acuerdo de tregua, tras meses de estancamiento en las negociaciones.
La oferta incluye una tregua de 40 días y la liberación de rehenes retenidos en Gaza a cambio de palestinos en encarcelados en prisiones israelíes.
Blinken afirmó que la propuesta es "extraordinariamente generosa de parte de Israel"
- Siguen los combates en Gaza -
En la madrugada, el ejército israelí bombardeó el norte y el centro de Gaza, incluyendo el campamento de refugiados de Nuseirat donde varios testigos reportaron que hubo enfrentamientos entre combatientes palestinos y soldados israelíes.
La ayuda externa, controlada estrictamente por Israel, llega a cuentagotas, principalmente desde Egipto, pero es insuficiente.
Estados Unidos presiona a Israel para que facilite la entrada de ayuda por carretera y comenzó la construcción de un muelle flotante en el litoral de Gaza para recibir insumos, que debería estar operativo el jueves.
En Rafah, los desplazados que sufrieron con el frío durante el invierno están expuestos ahora a la propagación de enfermedades y del hambre con el aumento de las temperaturas.
El conflicto estalló el 7 de octubre, cuando comandos de Hamás mataron a 1.170 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 250 en el sur de Israel, según un recuento de AFP basado en estadísticas israelíes.
Las autoridades israelíes estiman que 129 personas permanecen cautivas en Gaza, de las que 34 habrían muerto.
Israel lanzó una ofensiva de represalias contra Hamás, que ya ha dejado 34.568 muertos, en su mayoría civiles, según el Ministerio de Salud de este territorio gobernado por Hamás.
El diario The New York Times reportó que altos funcionarios israelíes esperan que la Corte Penal Internacional (CPI) emita órdenes de arresto contra miembros del gobierno y que Netanyahu puede estar entre los inculpados.
Según el diario estadounidense, autoridades de Hamás también podrían ser acusadas por el tribunal de La Haya.