La Universidad Autónoma de Chiriquí (Unachi) no está mirando para otro lado. Tras el revuelo por presuntos casos de nepotismo, la institución ha empezado a aplicar correctivos administrativos y acatar recomendaciones de la Autoridad Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (Antai).
De acuerdo con el informe de Antai, de 89 funcionarios evaluados, se determinó que 56 no incurrieron en prácticas de nepotismo. Sin embargo, 19 sí recibieron sanciones, aunque los procesos administrativos aún no concluyen.
El caso que encendió la mecha en la Unachi
Todo escaló tras la confesión pública del decano de Comunicación Social, quien admitió haber favorecido la contratación de su hija y esposa. Cerrud aclaró que este caso forma parte de otro procedimiento que Antai lleva por separado, por lo que más personas podrían ser incluidas en las recomendaciones finales.
Medidas internas
Entre los correctivos adoptados, la nueva dirección de Recursos Humanos implementó políticas más estrictas:
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Declaración jurada de funcionarios.
Prohibición de contratación de familiares.
Registro actualizado de vínculos familiares.
Antes, este registro no existía, lo que facilitó que se consolidaran “clanes familiares” dentro de la universidad.
Separación no es igual a destitución
Uno de los puntos que más cuestiona la opinión pública es por qué las separaciones de altos cargos no implican una salida de la planilla. Cerrud explicó que cuando se trata de cargos de libre nombramiento y remoción, los funcionarios son movidos a su posición original, no destituidos.
Compromiso institucional
La universidad asegura que hay un compromiso firme de aplicar las recomendaciones y mejorar los niveles de transparencia interna. “Tenga la seguridad de que sí se va a dar dijo Cerrud. Esa ha sido la línea de trabajo institucional.”