Panamá, un importante paso del comercio mundial por su ubicación estratégica y el Canal que conecta los océanos Atlántico y Pacífico, es identificado como uno de los puntos críticos de riesgo de colisión entre ballenas y buques, según un estudio publicado en Science.
El estudio, liderado por la Universidad de Washington, reveló que con solo aplicar medidas en un 2,6 % adicional de la superficie oceánica global, sería posible proteger los principales puntos críticos donde se producen colisiones fatales entre ballenas y embarcaciones. Esto incluye áreas costeras clave como Panamá, el Pacífico norteamericano y el Mediterráneo.
Transporte marítimo es un pilar económico
En Panamá, donde el transporte marítimo es un pilar económico, el reto de equilibrar la protección de la biodiversidad marina con las demandas de la industria es significativo. Según los expertos, implementar estrategias como la reducción de velocidad en áreas de migración y alimentación de ballenas podría marcar una gran diferencia para la conservación, sin generar costos elevados para el sector naviero.
El país tiene la oportunidad de liderar la región adoptando políticas que reduzcan el impacto del tráfico marítimo sobre estas especies en riesgo, especialmente considerando que muchas de las colisiones ocurren dentro de las zonas económicas exclusivas de los países, donde es posible aplicar medidas nacionales con apoyo de organismos internacionales.
Este llamado a la acción busca no solo preservar a las ballenas, sino también reforzar el compromiso de Panamá con el desarrollo sostenible y la protección de los océanos, en un contexto donde el comercio marítimo sigue creciendo a nivel mundial.