El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, afirmó que su ejército necesita más tiempo para preparar una contraofensiva de gran alcance contra las fuerzas de Rusia, según una entrevista publicada este jueves por la BBC.
El ejército ucraniano ha estado entrenando un nuevo contingente de fuerzas y almacenando municiones y equipos suministrados por los países occidentales que, según los analistas, serán clave para recuperar el territorio capturado por Rusia.
El calendario para que Kiev ponga en marcha sus esfuerzos para recuperar terreno en las regiones de Donetsk y Lugansk (este), así como de Jersón y Zaporiyia (sur) sigue siendo una incógnita.
El ministro ucraniano de Defensa, Oleksii Reznikov, declaró a finales de abril que "los preparativos están llegando a su fin".
Pero añadió que los potentes tanques Abrams prometidos por Estados Unidos "no tendrán tiempo de participar en esta contraofensiva", ya que su entrega a Ucrania está prevista para finales de 2023.
El jefe del grupo paramilitar ruso Wagner, Yevgueni Prigozhin, acusó el jueves a Zelenski de ser "deshonesto" en sus declaraciones a la BBC porque la contraofensiva ucraniana "está en pleno apogeo".
El miércoles, un alto cargo militar ucraniano dijo que las fuerzas de Kiev habían llevado a cabo contraataques en Bajmut, epicentro de los combates en el este de Ucrania, y obligado a las tropas rusas a retirarse de algunas zonas.
"En la dirección (de Bajmut), unidades de las fuerzas armadas ucranianas penetran en los flancos y, lamentablemente, en algunos lugares tienen éxito", afirmó Prigozhin, cuyos hombres están en primera línea en esta batalla.
En conflicto abierto con la jerarquía militar rusa, el jefe de Wagner se queja de una falta de municiones para sus hombres y amenazó con retirarse de Bajmut.