Dos semanas después de una caótica primera visita, los reyes de España regresan este martes a las zonas devastadas por las inundaciones del 29 de octubre, donde continúan las labores de limpieza y búsqueda de desaparecidos.
Consultada sobre la posible agenda del jefe de Estado y su esposa, la Casa Real se limitó a indicar que durante la mañana del martes anunciará "las localidades que visitan hoy".
En Chiva, una periodista de la AFP observó bastante movimiento policial.
"No me parece mal (que vengan)", pero "tenían que haber venido antes ya, si son la cabeza visible del país", dijo Javier Domínguez, un vecino de 56 años de Chiva, una localidad de 16.700 habitantes al oeste de la ciudad de Valencia que sigue mostrando la huella de la riada, con muchas casas destruidas.
Insultos y barro
El 3 de noviembre, cinco días después del desastre, una comitiva integrada por los reyes, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y el jefe del Ejecutivo de Valencia, Carlos Mazón, fue recibida con ira en Paiporta, localidad valenciana considerada el epicentro de la tragedia.
El grupo fue blanco de insultos y gritos de "asesinos" y el lanzamiento de barro, palos y otros objetos, en unas imágenes que dieron la vuelta al mundo.
En medio de la tensión, Sánchez fue evacuado y Mazón se retiró poco después, pero los reyes, con la ropa y el rostro manchados de lodo, lograron dialogar con algunas personas antes de marcharse también.
Tras lo ocurrido, anularon el desplazamiento que tenían previsto para esa misma tarde a Chiva, pero la Casa Real lanzó la promesa de regresar.