Como sucede con cada avance tecnológico, las herramientas de inteligencia artificial generativa como ChatGPT de OpenAI o el generador de imágenes Midjourney se utilizan tanto para la productividad como para las estafas y abusos. Entre esta nueva oleada de contenidos maliciosos destacan especialmente los deepfakes. Estas piezas de contenido audiovisual generadas artificialmente incluyen estafas a votantes mediante la suplantación de identidad de políticos o la creación de imágenes pornográficas no consentidas de famosos. Como muestra una reciente encuesta de Microsoft, las falsificaciones, las estafas y los abusos relacionados con la inteligencia artificial (IA) son lo que más preocupa a los usuarios de internet de todo el mundo.
Empatados en segundo lugar están los deepfakes y el abuso sexual u online, con el 69%. Las alucinaciones de la inteligencia artificial, que se definen como respuestas sin sentido ocupan el cuarto lugar, mientras que las preocupaciones por la privacidad de los datos ocupan el quinto lugar, con el 62%. En general, el 87% de los encuestados estaban preocupados al menos en cierta medida por un escenario problemático de la inteligencia artificial.