Al día siguiente de su contundente victoria en Iowa, Donald Trump compareció este martes en el tribunal de Nueva York donde empezó a ser juzgado por difamación en un juicio entablado por una escritora que ya le ganó otro proceso por agresión sexual el año pasado.
Según la prensa judicial presente en la sala, los dos protagonistas no intercambiaron ninguna mirada durante las primeras horas de la vista consagrada a la selección de los nueve miembros del jurado de este juicio que tiene previsto durar varios días.
Antes de iniciarse los alegatos de la acusación y la defensa, el millonario abandonó el tribunal, seguido de un cortejo de autos. Al final de la tarde Trump iba a dar un mitin en el estado de New Hampshire, en el noreste, donde el 23 de enero tendrá lugar el segundo voto de las primarias republicanas.
La semana pasada concluyó en un tribunal cercano otro juicio contra el magnate y dos de sus hijos por malversación financiera.
Esta nueva cita judicial se centra en unas declaraciones que hizo el republicano de 77 años en junio de 2019, después de que Carroll mencionó las acusaciones de violación en un artículo en una revista y en un libro.
En aquel momento el entonces presidente aseguró que Carroll "no era su tipo" y que se había inventado toda la historia para "vender su nuevo libro".
Pese a que Trump estuvo callado en la sala que preside el juez Lewis Kaplan, en su red social Truth Social arremetió contra su denunciante: "¿Pueden creerse que me tenga que defender contra la historia falsa de esta mujer?", al publicar extractos de viejas entrevistas y mensajes en las redes sociales de su acusadora.
El republicano, más que nunca favorito a ser el candidato de su partido a las elecciones presidenciales del 4 de noviembre, ha calificado los diferentes frentes judiciales a los que se enfrenta de "caza de brujas" para obstaculizar sus aspiraciones presidenciales.
Con la de este martes, el magnate tiene al menos seis citas judiciales civiles y penales pendientes, pero hasta ahora no parece que hayan hecho mella en su carrera política. Más bien al contrario.
Este juicio por difamación podría suscitar de nuevo la cuestión sobre el comportamiento de Trump con las mujeres, pues ha sido acusado en varias ocasiones de agresión sexual, aunque nunca ha sido condenado en el ámbito penal.
"Circo"
Como señal de las tensiones que rodean el nuevo juicio, el juez instructor pidió que se mantenga secreta la identidad de los miembros del jurado.
Asimismo, en un intento de evitar que la vista se convierta en mitin político, el juez delimitó el alcance del mismo a "los daños causados a la Señora Carroll por las declaraciones" que considera "difamatorias", "falsas" y "maliciosas".
La abogada de Carroll, Roberta Kaplan, escribió el pasado viernes al juez para advertirle del riesgo de que la presencia del republicano genere un "caos" y convierta en un "circo" la vista.