El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, prometió en Bruselas una "respuesta firme" a la presencia de tropas norcoreanas en el conflicto entre Rusia y Ucrania. En coincidencia con un ataque balístico ruso a Kiev, Blinken inició una serie de encuentros en Bruselas para defender la ayuda a Ucrania.
"Tuvimos una reunión sobre el apoyo a Ucrania (...) y este nuevo elemento, tropas de Corea del Norte inyectadas en la batalla, y casi literalmente en combate, que exige y tendrá una respuesta firme", dijo.
Estados Unidos sostiene que tropas de Corea del Norte están desplegadas en operaciones de combate en la región rusa de Kursk, donde el ejército ucraniano lanzó en agosto una ofensiva y mantiene ocupada una parte del territorio.
Este mismo miércoles, el servicio de inteligencia de Corea del Sur afirmó precisamente que militares norcoreanos ya "participan en combates" en Kursk, donde fueron desplegados hace dos semanas.
Aunque Blinken no adelantó en que forma podría darse esa respuesta a la presencia norcoreana, dijo que el despliegue de tropas era un paso "increíblemente peligroso".
En su visita de menos de 24 horas, Blinken participó de una reunión del Consejo del Atlántico Norte (la máxima instancia de decisión en la alianza militar) antes de un rápido encuentro con el canciller ucraniano, Andrii Sybiga.
"La defensa de Ucrania no puede ser puesta en espera", dijo el diplomático ucraniano.
El alto funcionario estadounidense dijo al fin de esa reunión que Estados Unidos "cuenta con nuestros aliados europeos para un fuerte suporte a Ucrania".
Reuniones reservadas con Josep Borrell
Blinken también mantuvo reuniones reservadas con el jefe saliente de la diplomacia de la UE, Josep Borrell, y con su sucesora designada, Kaja Kallas.
En su audiencia de confirmación ante el Parlamento Europeo, Kallas, ex primer ministra de Estonia, había enfatizado el martes que la UE debe mantener el apoyo a Ucrania "el tiempo que sea necesario".
El viaje del Blinken a Bruselas se produjo cuando Kiev y sus socios europeos temen seriamente que el presidente electo norteamericano, Donald Trump, corte el grifo de la ayuda.
Trump ya mantuvo un contacto telefónico con el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski. Según el diario Washington Post, también se comunicó con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, aunque el gobierno ruso ha desmentido esa versión.
Durante la campaña electoral, Trump prometió poner punto final a la guerra entre Rusia y Ucrania en apenas un día, incluso antes de asumir el poder. Aunque no dijo exactamente cómo lo haría.