El economista Fernando Aramburú analizó los desafíos que enfrenta Panamá ante las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y las posibles sanciones económicas que podrían afectar al país. Aramburú destacó que el Canal de Panamá es un pilar fundamental de la economía panameña, representando al rededor 25% de los ingresos del gobierno. Sin embargo, advirtió sobre los riesgos de cancelar contratos de manera arbitraria, como ocurrió en el caso de la mina.
En ese sentido, Aramburú llamó a la unidad nacional y a la defensa del Canal, resaltando que los panameños deben estar unidos y buscar aliados estratégicos en Latinoamérica.
Situación de los puertos y las concesiones
Aramburú también se refirió a la polémica sobre la gestión de los puertos en Panamá. Aunque admitió que algunos contratos no han sido óptimos, subrayó que la cancelación de un contrato debe ser un proceso bien fundamentado.
Aramburú opinó que los puertos deberían seguir siendo concesionados a empresas especializadas, ya que esta gestión requiere grandes inversiones y un manejo competitivo. A su juicio, sería un error que el Estado se encargara directamente de los puertos.
El riesgo de la pérdida del grado de inversión
Uno de los puntos más preocupantes para Aramburú es la posibilidad de que las calificadoras de riesgo retiren el grado de inversión a Panamá. El economista señaló que, aunque las amenazas de Trump no ayudan, el verdadero riesgo para la calificación radica en el mal manejo de las finanzas públicas en los últimos 20 años.
“Nos hemos gastado los $28 mil millones de dólares en planilla y subsidios, sin una correcta reestructuración fiscal”, lamentó Aramburú, quien mencionó que la reciente aprobación de la ley de Seguro Social podría agravar aún más la situación, ya que implica menores ingresos para el Estado.
Aramburú concluyó que la situación financiera de Panamá podría empeorar si no se toman decisiones correctivas serias, y advirtió sobre el impacto que esto tendría en la calificación de riesgo del país.