Amazon anunció el miércoles que recortará más de 18.000 puestos de trabajo de su plantilla, incluyendo algunos en Europa, alegando una "economía incierta" y el hecho de que el gigante minorista en línea había contratado rápidamente durante la pandemia.
El plan de reducción es el más grande entre los recientes anuncios de recortes laborales que afectan al sector de tecnología en Estados Unidos.
También es el recorte más severo en la historia de esta empresa con sede en Seattle.
Jassy aseguró que la dirección de la empresa estaba "profundamente consciente de que estas eliminaciones de puestos son difíciles para las personas, y no tomamos estas decisiones a la ligera".
Algunos de los despidos se producirán en Europa, según Jassy, quien añadió que los trabajadores afectados serán informados a partir del 18 de enero.
El repentino anuncio, apuntó Jassy, se hacía porque "uno de nuestros compañeros de equipo filtró esta información externamente".
El diario especializado Wall Street Journal, citando fuentes cercanas al gigante de la distribución, reportó previamente que los recortes laborales en Amazon podían afectar a unos 17.000 emplados, una cifra mayor a la estimada.
La empresa ya había anunciado planes de suprimir unos 10.000 puestos de trabajo en noviembre.
A finales de septiembre, el grupo contaba con 1,54 millones de empleados en todo el mundo, sin incluir los trabajadores de temporada que laboran en periodos de mayor actividad, en especial durante las fiestas de fin de año.
Durante la pandemia la empresa hizo contrataciones masivas para cubrir la demanda, duplicando así su personal a nivel global entre 2020 y 2022.
Sin embargo, su beneficio neto se hundió un 9% interanual en el tercer trimestre.
Grandes plataformas del sector tecnológico -muchas con modelos de negocio basados en publicidad- se enfrentan a recortes de presupuesto y de anunciantes que reducen sus gastos ante la inflación y el alza de las tasas de interés.
Meta, la empresa matriz de Facebook, anunció en noviembre el recorte de 11.000 empleos, aproximadamente el 13% de sus efectivos.
Twitter, comprada en octubre por el magnate Elon Musk, despidió a cerca de la mitad de sus 7.500 empleados.
Mientras que Snapchat suprimió aproximadamente un 20% de sus empleados en agosto, unas 1.200 personas.