Personalmente, no aguanto una subida más de las tasas de interés a mi hipoteca. Y hay muy poco que los bancos locales puedan hacer a menos que sus costos operativos y de acceso a capital bajen de manera trascendental. ¿Hay algún escenario dónde eso puede pasar?
Volvamos al escenario en el que su hipoteca y la mía bajen de costo: a pesar del crecimiento económico, el indicador que más está llamando la atención es la creación de empleo formal. Porque si por acá llueve pues por allá no escampa. En julio se crearon sólo 73 mil empleos y lo más preocupante es que para los meses de abril, mayo y junio se hiciera mayúsculos ajustes a la baja en los reportes que hablaban de una fortaleza indudable en la generación de empleo formal. En un escenario donde el desempleo crezca, no le quedará otra alternativa a la reserva federal de acomodarse a los designios del presidente Trump y ajustar a la baja.
La otra alternativa es esperar mayo de 2026 con paciencia y con calma porque no hay duda alguna que los días de Jerome Powell como jefe de la FED terminarán en ese mes y que el nombramiento del Presidente Trump para esta posición será un incondicional del presidente que procederá al recorte de tasas a como dé lugar, pase lo que pase.
Tendencia en el mercado
La economía estadounidense sigue emitiendo señales de preocupación en el mediano plazo con un déficit astronómico y con temores sobre su sobre endeudamiento. Los trillones de dólares en deuda que circula pues acarrea un costo alto que incluso a alertado a más de una calificadora de riesgo. Es posible que algo inédito ocurra: que las tasas de interés para productos como hipotecas o préstamos de autos se mantengan altas a pesar de los futuros recortes de la FED. Esto ya no sería por teoría financiera y económica sino por un temor en la debilidad inherente de la nación estadounidense.
Las barreras arancelarias empezarán a golpear los estados de ganancias y pérdidas de multinacionales en los próximos seis meses. Empresas como Apple están calculando que el efecto negativo en los resultados será de entre mil y mil doscientos millones de dólares. Por otro lado, pudiesen darse oportunidades de inversión para aquellos que apuesten a la renta fija de deuda comercial o corporativa ya que un recorte de tasas pudiese aumentar el valor facial de estas posiciones.
En fin, mucho aún por vivir en lo que resta de 2025. Esperemos más estabilidad para proyectar y para evaluar con algo más de certidumbre el cierre de lo que promete ser un desafiante año.