Los organizadores del Abierto de Australia dijeron este martes que "lamentan profundamente" el impacto que la deportación de Novak Djokovic haya tenido en otros jugadores y admitieron que "hay lecciones por aprender". El número uno del mundo, que no está vacunado contra el covid-19, fue deportado el domingo de Melbourne tras perder una batalla judicial para poder quedarse en el país y disputar el torneo, en el cual aspiraba a establecer un récord de 21 títulos de Grand Slam .
En su primer comentario sobre el proceso, la Federación de Tenis de Australia indicó que respetaba la decisión de los tribunales y que esperaba que ahora la atención se centre en la cancha.
"Como familia del tenis australiano, reconocemos que los recientes acontecimientos han sido una distracción importante para todos y lamentamos profundamente el impacto que esto ha tenido en todos los jugadores", indicó la federación australiana.
"Siempre hay lecciones por aprender y vamos a revisar todos los aspectos de nuestra preparación e implementación para informar sobre nuestra participación, como lo hacemos todos los años", agregó el organismo.
Además, los organizadores respaldaron la gestión del directivo de la federación, Craig Tiley, frente a las críticas por ser quien le dio la luz verde a Djokovic para viajar a Australia.