La selección argentina, liderada por el crack Lionel Messi, mantuvo este año la eficacia futbolera y la mística de campeón mundial en Catar-2022, pero sorpresivamente surgió el misterio de la continuidad o no de su artífice, el DT Lionel Scaloni.
Pero al terminar el encuentro, cuando el veterano defensa Nicolás Otamendi, con su golazo de cabeza, celebraba la noche más gloriosa de su carrera, cayó un balde de agua helada.
Sin mediar pregunta de la prensa, Scaloni disparó: "Estos jugadores nos han dado un montón y necesito pensar mucho qué voy a hacer. La vara está muy alta y está complicado seguir. Esta selección necesita un entrenador que tenga todas las energías posibles".
Un rato después, se hizo el silencio en un vestuario eufórico con los cánticos y saltitos de los jugadores. Nunca se supo si sabían algo de antemano.
El 7 de diciembre llegó el sorteo de la Copa América Estados Unidos-2024 y fue extraño que siguiese el enigma. Dijo Scaloni: "No hay nada raro, pero sigo pensando mi decisión".
Mil versiones ha difundido la prensa pero nadie dice con certeza qué pasa y si el conflicto es con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA).
Primer aniversario
Tan fuerte y crucial ha sido la labor del DT que a la escuadra la bautizaron La Scaloneta, un juego de palabras con su apellido y una forma popular en Argentina de nombrar a una camioneta como ‘la furgoneta’.
En cambio, Messi no dio señales de dejar su liderazgo: "Este grupo sigue consiguiendo cosas históricas. Me voy a preparar para tener un gran año".
A los 36 años, el astro confirmó que volverá a vestir la celeste y blanca para defender la Copa América ganada en Brasil-2021 con triunfo 1-0 sobre Brasil y un gol de emboquillada, toque de distinción que es marca registrada de Ángel ‘Fideo’ Di María.
El 18 de diciembre, al pais futbolero lo invade la nostalgia al cumplirse el aniversario de la conquista mundialista, tercera estrella después de las ganadas en Argentina-1978 y México-1986.
Será inolvidable aquella victoria por penales (4-2 a penales, tras empatar 3-3) contra Francia en el estadio Lusail de Doha. Fue, tal vez, la final mundialista más dramática y emotiva. Millones de personas lo celebraron en las calles de Argentina.
En 2023, la locomotora argentina no frenó. Enhebró 9 victorias y sólo una derrota. La Uruguay de Marcelo Bielsa la dejó sin invicto (2-0) en La Bombonera de Buenos Aires, por la clasificatoria.
Argentina hilvanó triunfos en amistosos ante Panamá (2-0), Curazao (7-0), Australia (2-0) e Indonesia (2-0). Por la clasificatoria venció a Ecuador (1-0), Bolivia (3-0), Paraguay (1-0), Perú (2-0) y Brasil (1-0).
Es un equipo afianzado más allá de ligeros cambios y con la confianza por las nubes. Se lo nota liberado del peso de 28 años de frustraciones. Ocupa el primer puesto en el ranking mundial de la FIFA.
Tiempo de revancha
Entre junio y julio de 2024, tendrá oportunidad de una revancha en tierra estadounidense de la derrota frente a Chile en la Copa Centenario-2016, (4-2 a penales, tras empate 0-0). Fue la noche en que Messi, sumido en la desesperación, dijo que renunciaba a la Selección. Su amor por la Albiceleste lo hizo volver pronto.
Argentina abrirá el torneo frente a un clasificado de la Concacaf (Canadá o Trinidad y Tobago), y luego se medirá con Chile y Perú.
Antes deberá resolver el destino de su DT, sombra que opaca el diáfano presente.
Desde que tomó el equipo tras la eliminación argentina en el Mundial de Rusia-2018, la campaña con Scaloni fue de 66 partidos, con 48 triunfos, 12 empates y apenas 6 derrotas. En los últimos premios The Best de la FIFA, fue elegido el mejor entrenador del mundo.