Actualidad - 

Rajoy se reunirá con el líder socialista para formar gobierno en España

El jefe del ejecutivo español saliente, el conservador Mariano Rajoy, se reunirá el miércoles con el líder del partido socialista, Pedro Sánchez, cuya formación es clave para permitir la formación de un gobierno en España tras meses de bloqueo.

"El miércoles (Rajoy) finalizará la ronda de contactos con la reunión con el secretario general del partido socialista", explicó en una rueda de prensa el portavoz del conservador Partido Popular (PP), Fernando Martínez Maíllo.

Ganador de las elecciones legislativas del pasado 26 de junio con 137 diputados en un congreso de 350 escaños, el líder conservador busca aliados para poder formar un gobierno, aunque sea en minoría, y sacar al país del bloqueo político que vive desde diciembre.

Las legislativas del 20 de diciembre dejaron un parlamento muy fragmentado en cuatro fuerzas políticas mayoritarias que fueron incapaces de cerrar un acuerdo de gobierno y forzaron la convocatoria de unos nuevos comicios.

Rajoy, que se mantuvo como jefe de gobierno interino y con funciones muy limitadas durante ese tiempo, salió reforzado ganando 14 escaños adicionales pero todavía lejos de la mayoría absoluta.

Su intención es conseguir una abstención del partido socialista PSOE, segunda fuerza con 85 escaños, que le permita formar un gobierno minoritario. El sábado, esta formación descartó intentar formar gobierno pero también rechazó apoyar a Rajoy.

"El propio partido socialista dice que tiene que ir a la oposición, por lo tanto no existe alternativa: o gobierna Rajoy o hay terceras elecciones", insistió este lunes Martínez Maíllo, pidiendo responsabilidad a los socialistas.

Antes de verse con Pedro Sánchez, Rajoy se reunirá el martes con los líderes de los dos nuevos partidos españoles: Pablo Iglesias de la coalición de izquierda radical Unidos Podemos (71 escaños) y Albert Rivera del centrista Ciudadanos (32 escaños).

Si no obtiene la abstención socialista, las posibilidades de Rajoy pasan por conseguir el apoyo a su investidura de Ciudadanos y dos partidos regionales vascos y canario. Aun así, se quedaría a un escaño de la mayoría absoluta y necesitaría una abstención para ser investido.