Panamá, 30 de junio de 2020.
La pandemia por el coronavirus ha afectado, para bien o para mal, a todas las empresas en los distintos sectores; aportando grandes lecciones y retos. Qué se puede esperar del consumidor “el día después” en América Latina, esta fue una de las interrogantes sobre las que se desarrolló Fórum Medcom en una edición digital que tuvo como invitado a Alberto Moriana, Vicepresidente de Ventas de Procter & Gamble para América Latina, quien agrupó en cinco puntos los aprendizajes de la industria y el retail de gran consumo sobre el consumidor post Covid-19.
La primera de estas lecciones es la información. Como empresarios hay que informarse para poderse anticipar a las situaciones. En esta crisis la secuencia de eventos es muy parecida en todas las regiones del mundo, por lo que estar pendiente de lo que ocurre en China y en Europa proporciona unas seis semanas de ventaja para prepararnos, ya que probablemente lo que sucede u ocurrió en dichas regiones o países, ocurrirá en América Latina. Ofreciendo un lapso que puede convertirse en una ventaja competitiva.
Luego de estudiar lo que sucede en otras latitudes, se debe tomar en cuenta que las personas recuperarán sus hábitos en cuanto puedan. Por lo que la recomendación de Moriana es no tomar decisiones a largo plazo o dramatizar el impacto del covid-19 porque se podría estar tomando una decisión errónea para el negocio. Sin embargo, el Vicepresidente de Ventas de Procter & Gamble para América Latina señala que hay ciertas cosas que se incorporarán como parte de la nueva normalidad, pero pequeñas y sutiles, sin gran impacto en los hábitos de consumo y compra.
Ante la crisis económica que se aproxima, los empresarios deben hacer cambios en sus estrategias de negocio. Es inevitable hacer ajustes estratégicos para adaptarse a la nueva situación, en ciertos sectores el consumidor ha movido las compras de unos formatos de tienda a otros. Dichos cambios se deben reflejar en los planes de negocio futuros.
De igual forma se debe tomar en cuenta que inicialmente los consumidores saldrán con cierta aprehensión, y lo que les invite a consumir en un lugar u otro, quizá ya no será la oferta o promoción, sino el equilibrio entre seguridad -en cuanto a medidas de bioseguridad y sanitarias- y la comodidad. Por ejemplo que la tienda o local haya tomado las medidas de precaución necesarias para evitar contagios, pero sin que esto represente una situación engorrosa para el consumidor.
Asimismo el paso y adopción de lo digital es inevitable, es necesario. Explica Moriana que en cinco meses se han avanzado cinco años en la adopción de herramientas digitales, a través de todos los grupos sociodemográficos. Las tareas más básicas de la cotidianidad, como educación y trabajo, se movieron en dicha dirección y ante la imposibilidad de realizarlas de manera presencial, por confinamiento obligatorio o prevención, ahora se experimentan y ejecutan a través de herramientas digitales que antes se usaban como apoyo y que ahora representan el modo total de ejecución, tal como se refleja en la educación virtual o a distancia y en el teletrabajo.
Concluyó Moriana en Forum Medcom que Panamá “está extraordinariamente bien posicionado. La globalización continuará y si hay globalización lugares como Panamá, hub logístico y de conectividad, son absolutamente necesarios. Panamá seguirá creciendo en los próximos años.”
FUENTE: Redacción Eco