El presidente del Partido Panameñista, José Isabel Blandón, analizó las recientes medidas arancelarias impuestas por el gobierno de Estados Unidos y su impacto en la economía panameña. Según el exalcalde de la ciudad de Panamá, la decisión del expresidente Donald Trump de aplicar un arancel del 10% a las importaciones podría tener efectos significativos en el comercio internacional y en el tránsito de carga a través del Canal de Panamá.
Impacto en la economía de Panamá
Blandón explicó que, aunque Estados Unidos es uno de los principales destinos de las exportaciones panameñas, el monto total de estas ventas es relativamente bajo. "Panamá exporta alrededor del 20% de sus productos a EE.UU., pero esto equivale a menos de $200 millones de dólares al año. Un arancel del 10% representaría un aumento de costos de unos $20 millones de dólares, pero no está claro quién asumirá este costo: el exportador panameño o el comprador estadounidense".
El sector pesquero es el más expuesto, ya que el principal producto de exportación de Panamá a EE.UU. es el pescado y los mariscos. No obstante, Blandón apuntó que otros países asiáticos están enfrentando aranceles más elevados, lo que podría generar oportunidades para los productos panameños en el mercado estadounidense.
Otro punto de preocupación es la posible reducción del tráfico por el Canal de Panamá si el comercio internacional se ve afectado por estas medidas proteccionistas.
Exigir una renegociación del TPC
El líder panameñista criticó la falta de una postura clara del gobierno de José Raúl Mulino frente a Estados Unidos y sugirió que Panamá debería aprovechar la coyuntura para exigir una renegociación del Tratado de Promoción Comercial (TPC). "Si EE.UU. está pidiendo que Panamá reciba a inmigrantes deportados, nuestro país debería negociar una reforma al TPC para suspender o retrasar la desgravación arancelaria de productos sensibles y proteger a nuestros productores".
Caso Martinelli y la embajada de Nicaragua
En otro tema, Blandón se refirió a la situación del expresidente Ricardo Martinelli, asilado en la embajada de Nicaragua en Panamá. Según Blandón, Martinelli no tiene intención real de exiliarse en Nicaragua y está usando esta situación como una estrategia de presión política. "Martinelli dice que está dispuesto a irse, pero está haciendo todo lo posible para no hacerlo. Las declaraciones contradictorias de Nicaragua sobre su asilo parecen coordinadas con él".
Blandón destacó que la embajada de Nicaragua se ha convertido en la "casa" de Martinelli, señalando que incluso hay fotos del exmandatario colgadas dentro de la sede diplomática. "Nunca había visto algo así. Yo estuve asilado en la embajada de Costa Rica en los 80 y no era así. Aquí, Martinelli ha convertido la embajada en su residencia".