El contralor general de la República, Anel Flores, rechazó este jueves las acusaciones de supuestas presiones políticas a diputados y negó haber intervenido en la elección de la nueva Junta Directiva de la Asamblea Nacional y en el despido de una funcionaria, en medio de crecientes señalamientos públicos contra su gestión.
El contralor también respondió a acusaciones del diputado Vigil, quien lo señaló de haber influido en la salida laboral de su esposa. Flores negó tal acción y sostuvo que la contratación de la mujer fue una solicitud directa del propio Vigil. “Eso fue un favor que me pidió a mí”, dijo.
En una declaración más contundente, el contralor adelantó que la próxima semana divulgará información sobre múltiples solicitudes de nombramientos hechas por diputados.
Flores calificó las recientes acusaciones como “calumnias” e insistió en que mantiene una relación respetuosa con los diputados, incluyendo al propio Herrera, con quien dijo haberse reunido la semana pasada.
Además, denunció que posee información sobre un presunto intento de compra de votos dentro de la bancada VAMOS, financiado por un empresario del área de Aguadulce.
El contralor exhortó a que se investigue a fondo este caso y mencionó que el empresario en cuestión estaría vinculado a una lechería en Aguadulce y tendría vínculos cercanos con el diputado Herrera.