El presidente ruso, Vladímir Putin, alertó hoy de que el cese del tránsito del gas ruso por territorio de Ucrania disparará los precios en la Unión Europea, y aseguró que Rusia está dispuesta a mantener sus suministros a los clientes europeos.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, anunció la semana pasada que el tránsito de gas ruso se interrumpirá a las 06.00 GMT del 1 de enero próximo, y alertó que tampoco permitirá el tránsito de gas ruso a través de su territorio aunque primero se venda a otro país, como Azerbaiyán, y después a empresas europeas.
El corte tendrá lugar al término del contrato firmado entre Moscú y Kiev y la negativa de Ucrania a negociar un nuevo contrato de tránsito que permita a Rusia ganar dinero para financiar la guerra.
Descartó la posibilidad de firmar un nuevo acuerdo
Al respecto, Putin descartó la posibilidad de firmar un nuevo acuerdo antes de que concluya 2024, pero aseguró que pese a la guerra Rusia ha mantenido los suministros a través de Ucrania y ha pagado a Kiev por el tránsito.
La decisión de Ucrania de suspender el tránsito a partir de enero fue recibida con críticas por Eslovaquia, cuyo primer ministro, Robert Fico, viajó recientemente a Rusia.
Además, ha sido uno de los pocos países europeos junto con Hungría y, hasta hace poco, Austria que ha seguido importando gas ruso por vía terrestre.
Varias empresas de Hungría, Eslovaquia, Austria e Italia también advirtieron a la Comisión Europea (CE) de que el cese del tránsito a través de Ucrania "provocará precios más altos para los consumidores en Europa" y "dificultará el suministro de gas"