Incendios forestales devastadores devoraban el sábado superficies récord de bosques en Grecia, por undécimo día consecutivo durante este "verano de pesadilla", al tiempo que el fuego en la vecina Turquía parecía calmarse. A ambos lados del mar Egeo, miles de turistas y residentes fueron evacuados en los últimos días, muchos por vía marítima, a causa de las llamas avivadas por las altísimas temperaturas.
En cambio, en Turquía la situación parecía mejorar bajo el efecto de las lluvias en la costa turca.
Al menos 1.450 bomberos griegos, ayudados por refuerzos de otros países, entre los que se cuentan 15 aviones continuaban una encarnizada batalla contra cinco grandes incendios al norte de Atenas, en la isla de Eubea, a 200 km al este de la capital, y tres fuegos en la península del Peloponeso, en el oeste, informaron los bomberos.
Se prevé que las llamas continuarán por los fuertes vientos y temperaturas de hasta 38 grados C pronosticados en algunas regiones el sábado.
Las autoridades griegas contabilizaron 154 incendios, 64 de los cuales seguían activos el viernes por la noche.
"Cuando termine este verano de pesadilla, repararemos todos los daños lo antes posible", dijo el primer ministro Kyriakos Mitsotakis el sábado por la mañana en el departamento de bomberos de Atenas, prometiendo que "se dará prioridad a la reforestación de las zonas quemadas".
Denso humo y olor acre
Al norte de Atenas, el fuego seguía avanzando con vigor hacia el este y el lago de Maratón, la mayor reserva de agua de la capital, tras haber provocado la evacuación de una decena de localidades. El denso humo y su olor acre se esparcieron por la capital durante la noche.
La autopista que une Atenas con el norte del país permanecía cerrada por precaución, mientras se evacuaban los campamentos de inmigrantes cercanos.
La policía detuvo el viernes a dos personas inculpadas por presunto incendio voluntario, según la agencia de noticias griega ANA.
En la isla de Eubea, más de 1.300 personas fueron evacuadas en barco durante la noche del pueblo costero de Limni, rodeado por las llamas. Más de 20 personas fueron evacuadas el sábado por la mañana de la playa de Rovies, también en esta isla del este del país, según medios de comunicación griegos.
Las autoridades locales pidieron más apoyo aéreo para luchar eficazmente contra el voraz incendio en Eubea.
En la península del Peloponeso, cientos de hectáreas ardieron al este del yacimiento arqueológico de Olimpia y en las regiones de Mani y Mesenia.
"El fuego quemó más de quince aldeas" en el este de Mani, según la alcaldesa Eleni Drakoulakou, denunciando la falta de medios aéreos. "Estábamos perdidos, mientras que un helicóptero lo habría reparado en dos horas", dijo a ERT TV.
Más de 5.000 residentes y turistas se vieron obligados a huir de la catástrofe de Mani, donde la alcaldesa Eleni Drakoulakou estimó que se quemó el 50% del este de la región turística montañosa.
Registro de áreas quemadas en Grecia
Al 5 de agosto, las áreas quemadas en Grecia ya habían sobrepasado la media del periodo comprendido entre 2008-2020 en un 180%, según datos de la Red Europea de Información sobre Incendios Forestales. Y eso sin contar las estimaciones para el 5 y 6 de agosto establecidas en más de 15.000 hectáreas devastadas, según el diario Kathimerini.
En esta etapa de 2021, los incendios han destruido más bosques y pinares que en los tres años sucesivos de 2017 a 2020, informó el sábado Andrianos Gourbatsis, exjefe de los servicios de bomberos griegos, en el sitio web Ethnos.
Un informe preliminar de la ONU, al que tuvo acceso AFP, califica al área mediterránea como un "foco de cambio climático".
Las lluvias providenciales que cayeron en el suroeste de Turquía han contribuido a mejorar la situación en la región de Antalya. Según las autoridades locales, los incendios ahora están bajo control, incluso en Manavgat, donde los aguaceros continuaron el sábado.