La red de recarga de baterías de Tesla satisface desde hace tiempo a los expertos en autos eléctricos. Pero los "supercargadores" de Elon Musk ahora están ganando un inesperado respaldo: el de las otras empresas automovilísticas. Ford fue la primera en anunciar una asociación con Elon Musk a finales de mayo, seguida de General Motors a principios de este mes.
Añadió que espera que el sistema de Tesla, conocido como Estándar de Carga de América del Norte (NACS), se unifique para el continente lo que "permitiría una adopción más masiva."
El dominio de la red de Tesla refleja la reputación de fiabilidad del sistema, así como la lenta expansión de las opciones rivales de recarga de autos eléctricos en medio de problemas en la cadena de suministro y el pesado despliegue de un gigantesco programa federal.
Ganarse la aceptación de los gigantes automovilísticos de Detroit es el último golpe de Elon Musk y ha contribuido a que las acciones de Tesla suban un 40% desde el anuncio de Ford el 25 de mayo. Aun así, muchos expertos afirman que es prematuro declarar vencedor al NACS.
Expertos en autos eléctricos señalan que otros fabricantes de automóviles como Volkswagen y Hyundai siguen apostando por la norma rival, conocida como sistema de carga combinada (CCS).
"Finalmente tendremos una norma única, pero hay que ver cuánto tardaremos", dijo John Eichberger, director ejecutivo del Transportation Energy Institute.
Eichberger dijo que un sistema de recarga dominado por Elon Musk podría generar preocupaciones monopólicas, y añadió que aún no está claro hasta dónde llegará el patrón de Tesla para compartir una tecnología que hasta hace poco era de su propiedad.