Las autoridades de California anunciaron este lunes el restablecimiento del porte obligatorio de mascarilla dentro de lugares públicos cerrados para frenar un repunte de casos de covid-19 en ese estado en las últimas semanas. La medida, que entra en vigor el miércoles, se aplica a todas las personas, vacunadas o no.
El secretario de salud de California, Mark Ghaly, justificó la decisión a raíz de la rápida progresión de casos de covid-19, que tuvieron un aumento del 47% desde el Día de Acción de Gracias a finales de noviembre.
El número de nuevos casos diarios de coronavirus en California pasó así de 9,6 a 14 por cada 100.000 habitantes. El porte de mascarillas podría, según Ghaly, evitar un rebrote de las infecciones y de los decesos como el sufrido en ese Estado el pasado invierno.
Esta medida para prevenir la propagación del covid será obligatoria hasta el 15 de enero.
California también ha endurecido los controles a las personas no vacunadas que deseen asistir a eventos de más de 1.000 participantes en un espacio cerrado, al exigirles una prueba negativa de covid-19 realizada entre 24 y 48 horas antes (según el tipo de prueba), en lugar de las 72 horas exigidas previamente.
El anuncio de las autoridades californianas se da el día mismo de la entrada en vigor de una medida similar en la ciudad de Nueva York.