El ex primer ministro británico, Boris Johnson, deberá responder a preguntas difíciles el miércoles y el jueves en una audiencia en Londres, en el marco de la investigación pública sobre su actuación frente a la pandemia de covid, blanco de fuertes críticas de sus antiguos asesores. Desde el inicio de las audiencias en junio, estos colaboradores, entre ellos varios asesores y científicos, han descrito a un primer ministro abrumado, indeciso, poco preocupado por las víctimas cuando estalló la pandemia a principios de 2020, con un gobierno dividido y caótico.
Johnson, de 59 años, un orador brillante más rápido en responder con humor que con precisión, deberá poner todo su empeño para convencer en la audiencia de que a principios de 2020 era la persona adecuada para afrontar la situación.
- Disculpas "sin reservas" -
Johnson pidió este miércoles disculpas por "el dolor y las pérdidas" causados por el covid-19 y admitió que se equivocó en algunas decisiones, durante una investigación pública sobre su gestión durante la pandemia.
"Inevitablemente, nos equivocamos en algunas cosas", continuó el exdirigente, antes de añadir que "lo hicimos lo mejor que pudimos", señalando además que asumía la responsabilidad personal de las decisiones tomadas.
Johnson, que llegó tres horas antes a la oficina gubernamental londinense en la que estaba citado, será sometido a una serie de preguntas difíciles este miércoles y jueves durante esta audiencia, tras haber sido objeto de fuertes críticas de sus antiguos asesores.
Johnson preparó cuidadosamente su defensa, leyendo 6.000 páginas de documentos, encerrado durante horas con sus abogados, según el diario The Times, que reveló las grandes líneas de su intervención.
Pese a todo, en su comparecencia en una oficina gubernamental en el centro de Londres, el dirigente conservador podría disculparse sin reservas" y admitir que cometió "errores", subestimando inicialmente los riesgos del virus.
La vida del propio Johnson corrió peligro debido al covid en abril de 2020.
El 23 de marzo de 2020 se impuso un primer confinamiento a los británicos, seguido de otros dos, entre los más duros de Europa.
Las revelaciones sobre fiestas ilegales en Downing Street durante este período provocaron un escándalo y contribuyeron a la caída de Johnson, quien se vio obligado a dimitir en julio de 2022.
Pero este eterno optimista, que prestará declaración durante dos días, debería afirmar también que su Gobierno "tomó las decisiones correctas en el momento adecuado", contribuyendo a salvar a decenas o cientos de miles de vidas.
También tratará de insistir en el programa de vacunación, implementado desde principios de 2021, antes que muchos otros países.
El covid acabó con la vida de más de 232.000 personas en el Reino Unido.
Ante la comisión de investigación, que obtuvo miles de mensajes de WhatsApp y numerosos documentos, algunos de sus antiguos colaboradores hablaron de un primer ministro superado por los acontecimientos y que decidió el confinamiento demasiado tarde.
Los trabajos de la comisión independiente de investigación, presidida por la antigua jueza Heather Hallett, podrían durar hasta 2026.