Wall Street cerró el viernes una semana en números negativos, hundida por los altas tasas de los bonos y por los riesgos geopolíticos antes del fin de semana.
El rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años alcanzó brevemente el 5% en los intercambios luego del cierre la noche del jueves, un máximo desde julio de 2007. El viernes horas de la noche se estabilizaban en el 4,91%.
"En momentos en que nos enfrentamos a una muralla de preocupaciones, los inversionistas muestran poco interés en ir más allá de ese muro en estas últimas sesiones", comentaron a su vez los analistas de Schwab.
La onza de oro, un activo por excelencia considerado como refugio, ganó 0,56% a 1.991,60 dólares, luego de que durante la sesión tocó máximos en cinco meses, justo por encima de los 2.000 dólares la onza.
En el renglón de los indicadores, el gobierno estadounidenses reveló que el déficit presupuestal federal llegó a los 1,7 billones de dólares para el ejercicio fiscal 2023 que cerró el 30 de septiembre.
El déficit aumentó así en un 23% debido a una reducción de los ingresos fiscales producto de los impuestos pero también debido a un aumento de la deuda pública, a raíz del aumento de los intereses.