El directorio del Banco Mundial (BM) aprobó un préstamo a Panamá de 350 millones de dólares para apuntalar reformas orientadas a descarbonizar los sectores de transporte y la energía y para apoyar al país en la generación de capacidades para adaptarse y mitigar los efectos del cambio climático.
Este nuevo crédito respalda las reformas establecidas en dos pilares, el primero de ellos enfocado en promover una transición hacia las energías limpias, un crecimiento con bajos niveles de emisión de carbono y socialmente inclusivo, e innovaciones tecnológicas favorables para la preparación frente a desastres.
En ese sentido, Panamá seguirá fortaleciendo los marcos normativos y regulatorios que se crearon para reducir las emisiones de los sectores de la energía y el transporte, dijo el multilateral, que añadió que este pilar respalda además las reformas políticas orientadas a la electrificación rural por medio de las energías renovables y la conectividad digital que beneficiará a las mujeres y a los territorios indígenas.
El segundo pilar ayudará a Panamá a seguir desarrollando sus capacidades para gestionar sus recursos naturales de manera sostenible y planificar frente al cambio climático, lo que incluye el apoyo a instrumentos que contribuyan a mejorar la planificación y la gobernanza climática, como lo es el Sistema Nacional de Adaptación al Cambio Climático y los Escenarios de Cambio Climático.