Rusia fue excluida del Mundial de fútbol por su organizadora, la FIFA, que anunció este lunes la suspensión de las selecciones nacionales y de los clubes rusos "hasta nueva orden", como reacción a la invasión de Ucrania, en un comunicado conjunto con la Confederación europea (UEFA). Los rusos, anfitriones del último Mundial, en 2018, quedan así descalificados de los repechajes de la próxima edición, que debían disputar a finales de marzo con un billete en juego para Catar-2022 (21 de noviembre-18 de diciembre), y su selección femenina no podrá disputar la Eurocopa en Inglaterra, en julio.
Rusia debía disputar un partido de repechaje el 24 de marzo contra Polonia, pero los polacos repitieron en varias ocasiones su negativa a disputarlo, ni siquiera en terreno neutral.
La FIFA y la UEFA siguen así parcialmente la postura del Comité Olímpico Internacional (COI), que recomendó a las federaciones internacionales "no invitar" a los deportistas y equipos rusos y bielorrusos en las competiciones deportivas internacionales.
Privada del Mundial catarí, Rusia se ve aislada por el mundo del deporte, a la espera de las decisiones del Comité Paralímpico Internacional, que se expresará el miércoles, a dos días del inicio de los Juegos Paralímpicos de Invierno de Pekín.
Además, la UEFA rompió este lunes "con efecto inmediato" su colaboración con el gigante ruso Gazprom, uno de sus principales patrocinadores desde 2012.
El contrato estaba estimado en 40 millones de euros (sobre 45 millones de dólares) al año según medios especializados, y cubría la Liga de Campeones, las competiciones internacionales organizadas por la UEFA, así como la Eurocopa-2024 que tendrá lugar en Alemania.