Con una propuesta centrada en la tradición, la calidad y la sostenibilidad, la panadería Krume Bäcker se ha posicionado como una referencia en la elaboración de pan de masa madre orgánico en Panamá. Su fundadora, Natalie Salzmann, compartió su visión y filosofía detrás del negocio que ha conquistado a quienes valoran el sabor auténtico y los ingredientes naturales.
Ingredientes simples, pan saludable
En Krume Bäcker, el pan se elabora únicamente con tres ingredientes: harina orgánica proveniente de Austria, agua filtrada y sal del Himalaya. Salzmann invita a los consumidores a cuestionarse lo que comen: “Es importante que si vas a comprar pan en un supermercado, fijarse en los ingredientes que tiene y preguntarse: ¿por qué tantos ingredientes?, ¿qué estoy comiendo?”
Recuperar lo tradicional
Para Salzmann, su trabajo también implica rescatar prácticas tradicionales que se están perdiendo. “Consigo todo lo que pueda en Panamá, y lo que no, lo traemos del exterior”, señaló. Aunque reconoce que el país tiene poca producción de trigo, destaca su compromiso con apoyar a pequeños emprendedores locales, como lo fue ella al inicio de su proyecto.
El valor del equipo humano
Más allá del producto, Salzmann subraya la importancia del equipo de trabajo: “Sin tu equipo no vas a avanzar. Necesitas de un equipo que crea en tu visión y que vea un futuro en el proyecto, porque ellos también lo impulsan”. En ese sentido, considera clave invertir en talento y mantener cercanía con los colaboradores para conocer sus retos y crear un entorno laboral más cómodo y productivo.