Un político bangladesí manifestó su estupor este martes al saber que su hijo era uno de los yihadistas que mataron a veinte rehenes en un restaurante de la capital, Daca.
"Nunca nos lo pudimos imaginar", declaró Babul, miembro de la Liga Awamie, el partido en el poder en Bangladesh
Según explicó, su hijo llevaba meses desaparecido, pero "no había nada en la casa, ni libros ni nada que diera a entender que iba por ese camino. No teníamos ni idea".
El ministro del Interior, Asaduzzaman Khan, había explicado a la AFP que los autores de la toma de rehenes, ocurrida la noche del viernes en un restaurante frecuentado por extranjeros, eran jóvenes formados de familias acomodadas.
La masacre fue reivindicada por el grupo yihadista Estado Islámico (EI), y en el asalto de las fuerzas del orden bangladesíes murieron seis jóvenes.
Uno de ellos podría ser un inocente que se vio atrapado en medio del tiroteo. Entre los otros cinco figuran un licenciado de una universidad privada del país, un estudiante de 18 años de una escuela de renombre, un profesor de escuela maternal de 26 años y el hijo de Babul.
El político contó que había manifestado a sus allegados su profunda preocupación por la desaparición de su hijo.
"Cuando andaba buscando a mi hijo descubrí que habían desaparecido muchos otros jóvenes. Muchachos muy bien formados, de buenas familias, instruidas, hijos de gente con profesiones liberales, hijos de funcionarios".
"Compartía mi dolor con ellos. No sabemos lo que está pasando".
De los veinte rehenes muertos en el ataque del viernes noche en el barrio diplomático de Daca, nueve eran italianos, siete japoneses, dos bangladesíes, uno estadounidense y otro indio.