Francisco Bustamante, exsubdirector de la Caja de Seguro Social (CSS), abordó la estrategia del gobierno panameño para garantizar el financiamiento de la CSS. Bustamante discutió cómo el Estado planea movilizar recursos significativos sin aumentar impuestos y sin comprometer su capacidad fiscal.
“La evasión del ITBMS se estima en aproximadamente $1,700 millones, de los cuales el gobierno espera recuperar, como mínimo, el 70%,” comentó Bustamante, resaltando el gran impacto de esta medida.
Otra de las estrategias consiste en redirigir a la CSS los fondos que la Ley de Responsabilidad Fiscal obliga al FAP. Este cambio aliviaría las presiones sobre el presupuesto, permitiendo que los recursos del Canal de Panamá se destinen a pensiones.
Modernización de la DGI y colaboración ciudadana
Bustamante enfatizó que la Dirección General de Ingresos (DGI) necesitará fortalecer sus sistemas de monitoreo y cobro de impuestos, apuntando a una mayor automatización y fiscalización.
“La DGI debe redoblar sus esfuerzos de modernización tecnológica, pero también es esencial que la ciudadanía colabore solicitando facturas en cada compra,” afirmó, haciendo un llamado a la responsabilidad social para reducir la evasión.
¿Qué pasará si no se logra la meta de recaudación?
La sostenibilidad del aporte a la CSS depende de que las metas de recaudación se cumplan. Si no se alcanza el nivel esperado, Bustamante advirtió que el gobierno deberá tomar medidas de austeridad para evitar un aumento en el déficit.
Una solución fiscal conservadora
Finalmente, Bustamante subrayó la importancia de mantener un enfoque conservador en la gestión de recursos, evitando la acumulación de más deuda. Este enfoque, a su juicio, ayudaría a que el Estado mantenga el equilibrio financiero sin comprometer las obligaciones contractuales.