El trabajo coordinado y oportuno entre el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) y el Servicio Nacional Migración de Panamá, sobre la situación que se avecinaba luego de la pandemia, impidió que el mes de octubre de 2022, el más crítico por el paso de migrantes por la selva de Darién, se convirtiera en una crisis mayor, dijo el ministro de Seguridad Pública, Juan Manuel Pino.
Este año han transitado por Darién más de 230 mil personas y el mes “más crítico fue octubre porque pasaron 60 mil personas, pero “gracias al trabajo mancomunado, humanitario y a las capacitaciones adquiridas”, se pudo movilizar a estas personas”.
Actualmente en la Estación de Recepción Migratoria de Canaán Membrillo hay 136 migrantes; en San Vicente 48; en Lajas Blancas 201; en Bajo Chiquito 337 y en Los Planes de Gualaca 991.
Las declaraciones del ministro Pino se dieron durante una gira interinstitucional que realizó en compañía de la canciller Janaina Tewaney Mencomo, del director del Servicio Nacional de Fronteras, (Senafront), Oriel Ortega y la embajadora de Estados Unidos en Panamá, Mari Carmen Aponte, que sirvió para actualizarlas de la realidad migratoria y de seguridad que se da en la provincia de Darién.
El titular de Seguridad Pública, hizo un llamado a las personas que pretenden pasar por la selva de Darién para llegar a Estados Unidos. “Verifiquen la información, vean internet y escuchen los llamados que hace Panamá y las advertencias de pasar por aquí para que no sean engañados”.
Entre tanto, la directora Gozaine indicó que esta gira de trabajo sirvió para que la embajadora escuchara de viva voz los testimonios de los migrantes en la comunidad de Bajo Chiquito y para que constatara las mejoras que ha hecho el gobierno panameño en atención del personal y para la población migratoria.
En la gira de trabajo se pudo llegar a la comunidad de Bajo Chiquito, a la Base de Nicanor del Servicio Nacional Aeronaval, a la Primera Brigada Oriental del Senafront en Metetí y a la Estación Temporal de Migrantes en San Vicente.