El Magistrado del Tribunal Electoral, Eduardo Valdés Escoffery, reveló parte de su experiencia en las pasadas elecciones. Sobre sí José Raúl Mulino debía tomar el cargo de candidato a presidente del partido Realizando Metas, explicó que tuvieron que conseguir opiniones de expertos que incluso han participado en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
Se trató de una situación que mantuvo en vilo a la membresía y a la preferencia de aquellos que querían votar, todo esto, siendo la candidatura que venía liderando las encuestas en aquel momento.
"Realmente estuvimos muy preocupados y al país entero porque la Corte Suprema de Justicia (CSJ) vino a decidir el día 3 de marzo de 2024, es decir, faltando dos días para la elección del 5 de mayo. En fin, había una serie de escenarios que ponían en peligro toda la estabilidad del proceso", explicó en el programa En Contexto.
Por otro lado, reiteró que históricamente el Pleno del Tribunal Electoral es el único que ha estado en capacidad de poder inhabilitar candidatos. Sin embargo, se puso en la reforma una norma para darle competencia a los juzgados administrativos, pero no pensando en todos los casos, sino en ciertos casos en donde, por ejemplo, las personas que ocupan ciertos cargos públicos y no pueden entonces, si no renuncian, postularse a cargos de elección popular.
"Para nosotros había que hacerlo en Pleno por las circunstancias. El tiempo exigía una respuesta rápida y un pronunciamiento expedito", manifestó el magistrado.
Elecciones del 5 de mayo
Sobre las pasadas elecciones del 5 de mayo, Eduardo Valdés Escoffery, destacó como positivo el entusiasmo de la población en salir a votar, y sobre todo el grupo más reacio a participar, no en Panamá sino en el mundo entero y son el grupo de 18 a 25 años.
Destacó que este grupo dio muestras en el mes de noviembre, cuando salió masivamente a respaldar la protesta, entre comillas solamente para el tema la minera, pero todos saben que había muchas frustraciones detrás. Fue el grupo etario que incrementó proporcionalmente más que los demás su participación para llevar el porcentaje de participación al 77.7, casi 78 por ciento, el porcentaje más alto que hemos tenido en la historia republicana.
