El año escolar 2025 impone retos a los padres de familia en el proceso enseñanza- aprendizaje de sus hijos. La batalla por la atención se traslada ahora a las aulas de clases con el uso de los celulares, por lo que a juicio del economista, Carlos Araúz, hace falta una "gran alianza solidaria", para ayudar en el manejo del tema.
La oficina del protector de la salud en los Estados Unidos de América, emitió un reporte diciendo que los jóvenes que abusaron del celular entre 2009 y 2019, desarrollaron en un 40% más sentimientos de ansiedad y depresión, afectando el resto de sus vidas.
Debate sobre el uso de celulares
Un estudio de la Universidad de Cambridge con resultados publicados en 2022 indicó que jóvenes damas que aumentaron el uso del celular entre los 11 y 13 años estaban más desencantadas con sus vidas, mientras que lo mismo ocurre con jóvenes varones, pero quizás un poco más tarde en la vida - 14 y 15 años de edad.
En la actualidad, la opinión pública se debate entre una mejor formación académica o la tranquilidad mental y el hecho de suspender o limitar el uso de celulares en las escuelas y colegios.
Otro estudio de la Universidad de Birmingham procuró determinar si había mejoras en los resultados académicos de grupos de jóvenes adolescentes a quienes se les restringió el uso del celular versus otros que no. El estudio pudo determinar que aquellos jóvenes que usaban su celular sin control demostraban bajones emocionales más frecuentes, pero no hubo conclusión en lo concerniente a las notas por esfuerzo académico.
"Parece que la conclusión inicial es que hay que atacar el problema en casa, en la calle, y en la escuela. Una acción aislada como la de suspender el acceso a teléfonos en los salones de clases, no será suficiente. Habrá que seguir monitoreando el tema muy de cerca", concluyó Araúz.