Varios senadores de EEUU han abogado por una diplomacia más pragmática en América Latina para contrarrestar la influencia de China, durante una audiencia este jueves 28 de julio para examinar la nominación de los nuevos embajadores para El Salvador, Nicaragua y Uruguay.
Para el demócrata Tim Kaine, Washington debe evitar centrarse únicamente en los montones de problemas de la región y prestar atención a las historias exitosas, como la Alianza para el Desarrollo en Democracia, integrada por Panamá, República Dominicana, Costa Rica y Ecuador.
El Salvador, dirigido por el presidente Nayib Bukele, y Nicaragua, gobernado por Daniel Ortega, cuya reelección Washigton considera fraudulenta, se sitúan en el otro lado de la balanza diplomática.
William H. Duncan, nominado a ser embajador de El Salvador, asegura que de ser confirmado en el cargo defenderá la democracia, los derechos humanos y la lucha contra la corrupción y la impunidad.
El senador republicano Rob Portman consideró llamativo que Bukele trate la relación con Estados Unidos de una forma no indicativa de cooperación, cuando su país recibió más de 7.000 millones de dólares en remesas en 2021 desde territorio estadounidense, donde viven dos millones y medio de salvadoreños.