Cientos de personas pasaron la noche de este viernes en las inmediaciones del Vaticano para ser de los primeros en acceder a la plaza de San Pedro y asistir al funeral del papa Francisco, envuelto en un férreo protocolo de seguridad.
Es de noche, una capa de neblina cubre todavía la cúpula de San Pedro, y aunque todavía faltan cinco horas para que de inicio el funeral solemne del papa Francisco, a la zona han llegado ya cientos de fieles para poder rendirle el último tributo.
Esperan, eso sí, fuera del perímetro de seguridad que rodea todo el Vaticano durante la noche y que, una vez abierto, permitirá controlar una llegada de personas que se espera masiva, pues las autoridades italianas esperan la participación de unas 200.000.
Gabriella ha llegado a la zona de Castel Sant'Angelo, no ha dormido y espera a que abran las barreras en la misma zona, cerca del Castel Sant'Angelo.
"Nuestra intención es lograr un buen puesto en la Plaza de San Pedro. Adoraba su humanidad y el modo en que hacía de la normalidad algo extraordinario", reconoce junto a un amigo que se niega hablar, puede que algo adormilado.
La gran afluencia de fieles responde también a que muchos habían ya planeado su presencia a Roma estos días, sobre todo jóvenes de todo el mundo que debían asistir al Jubileo de los Adolescentes y a la canonización del 'primer santo millenial', Carlo Acutis, que ha quedado pospuesta por la defunción pontificia.
Un grupo de chavales de México, El Salvador y Honduras se hacen notar entre la marabunta. Es de noche ciega en Roma pero desbordan energía, hablan, lo comentan todo mientras hacen tiempo.
Inmediaciones del Vaticano han amanecido blindadas
"Nos despertamos a las 2:15", admite, riendo, Janisse, una joven de 15 años que ha llegado a la capital italiana.
La de este sábado se prevé una jornada histórica: la muerte de Francisco, el primer papa latinoamericano de la historia y conocido como un líder humilde, de los últimos, ha sacudido al mundo y, por eso, más de 250.000 personas han pasado desde el miércoles ante su féretro, expuesto abierto en la basílica vaticana.
Janise, hondureña de 15 años, también ha hecho noche con sus amigos en 'Santo Spirito' y se muestra entusiasmada con poder asistir a un hecho tan importante, aunque su intención originaria era estar presente en la subida a los altares de Acutis.
"Queremos estar acá porque es un momento importante para el mundo, algo que probablemente jamás volveremos a ver. Queremos estar cerca para verlo todo y manifestar nuestra presencia", confiesa.
En pocos minutos el grupo que se agolpa en el 'Santo Spirito' se agranda, mientras una cadena de voluntarios del Jubileo hacen una cadena para contenerla, justo detrás de las barreras metálicas que se han dispuesto en todo el área para organizar las masas.
Elia es un joven romano que se ha sumado al protocolo de seguridad: "La situación está bastante cargada", sostiene con una sonrisa.
Han sido levantadas varias pantallas gigantes
Todas las inmediaciones del Vaticano han amanecido blindadas y, hasta que se abran los accesos dispuestos, solo se puede acceder demostrando que resides o trabajas dentro del perímetro.
La seguridad es total ya que el funeral dará comienzo a las 10:00 horas locales (8:00 GMT) con la presencia de delegaciones de unos 130 países, entre jefes de Estado, monarcas y organizaciones internacionales, entre estos el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
A lo largo de Vía de la Conciliación, la gran avenida que une Roma con la Plaza de San Pedro, han sido levantadas varias pantallas gigantes.
Tras las exequias, el féretro del pontífice argentino cruzará Roma en un cortejo fúnebre para su traslado a la basílica de Santa María La Mayor, donde Francisco decidió ser sepultado.