En el sur de México, organizaciones defensoras de la libertad de prensa reportaron este jueves el secuestro de tres periodistas en el estado mexicano de Guerrero (sur), una región golpeada por la violencia ligada a la delincuencia organizada. Las oenegés Artículo 19 y CIMAC señalaron en un comunicado que el periodista Marco Antonio Toledo, director del semanario El Espectador y corresponsal de diversos medios, fue secuestrado por hombres armados en la ciudad de Taxco el pasado 19 de noviembre junto con su esposa y su hijo.
México es considerado uno de los países más peligrosos del mundo para ejercer la profesión del periodismo, según la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF). Apenas el 16 de noviembre, el fotoperiodista de El Heraldo de Juárez, Ismael Villagómez, fue asesinado de un balazo en la fronteriza Ciudad Juárez. Hasta el momento hay tres personas detenidas por el homicidio. Al menos otros cinco periodistas han sido asesinados en México en 2023, según la organización Reporteros Sin Fronteras (RSF). Las autoridades investigan si estos hechos están relacionados con su labor informativa.
La Fiscalía General del Estado (FGE) activó ahora tres fichas de búsqueda en las que solo indica que los vieron por última vez en Taxco el 19 de noviembre, así como la fecha de denuncia, el 22 de noviembre. La también activista Mexico-estadounidense detalló que abandonaron a los hijos de los periodistas de 3, 5 y 13 años en la calle tras el secuestro de los comunicadores.